La Montaña de Montserrat esconde en su interior un impresionante mundo subterráneo lleno de historia. Dentro del macizo conglomerático, la acción del agua de lluvia, infiltrada a través de grietas, ha ido disolviendo la roca durante millones de años y ha dejado como legado una variada gama de simas y cuevas. Todo un paisaje cárstico decorado con espectaculares espeleotemas (estalactitas, estalagmitas, etc.) que la dotan de una relevancia especial.

Entre ellas destaca la Cueva de Montserrat, conocida tanto por su espectacularidad, que fascinó e inspiró a lo largo de los años a artistas como Rusiñol y Gaudí, como por ser la que mejor resume la historia de la espeleología catalana.

Las cuevas se pueden visitar sin reserva previa los fines de semana. Entre semana se organizan visitas organizadas para grupos.